top of page

Correo

  • Luis Gabriel Vargas
  • 9 abr 2020
  • 1 Min. de lectura

Al terminar de construir una casa sobre un lote baldío adquirido años atrás, comenzaron a llegar cartas de cobro por pagos no realizados. De nada sirvieron querellas, reuniones de firmas y declaraciones juramentadas, las misivas siguieron acumulándose en el pórtico. Finalmente un día en parte aburrido, enojado y asustado decidí derribar la edificación para acabar con el correo, sin necesidad de matar al cartero.

Comments


  • Facebook Clean Grey
  • Twitter Clean Grey
  • LinkedIn Clean Grey
bottom of page